martes, 23 de junio de 2009

Nightclubbing vol.2

Después del papeo Gav y yo nos volvemos a su casa y nos quedamos levantados hasta tarde, bebiendo, contando batallitas, hablando de la vida y poniéndonos al día en general. Hay algo de su actitud que me entristece. Me resulta espantoso sentirme así respecto a él y no me estoy mostrando condescendiente porque el tío me caer muy bien, pero es como si se hubiera topado cara a cara con sus limitaciones sin haber aprendido a apreciar lo que tiene. Me dice que sigue en el mismo lugar del escalafón del departamento de empleo y que de ahí no va a pasar. Le han negado el acceso tantas veces que ha dejado de presentar solicitudes. Cree que le tienen fichado como bebedor "Es curioso, cuando empecé a trabajar allí, era poco menos que obligatorio beber. Si tenías fama de pasar mucho tiempo en el pub eso demostraba lo sociable que eras, que podías establecer contactos. Ahora te etiquetan como un borachín. Sarah... quiere que lo mande todo al carajo y me vaya de viaje con ella, a la India y todo eso" dice sacudiendo la cabeza.


"Adelante", le digo, con la voz cargada de apremio.

Me mira como si le hubiera sugerido dedicarse a la pederastia. " Que lo sugiera ella, vale, Mark; tiene veinticuatro años, no treinta y cinco. Hay una gran diferencia"

"Vete a la mierda, Gavin. Si no lo haces, lo lamentarás durante el resto de tu vida. Si no lo haces la perderás a ella y seguirás en esa puta oficina dentro de veinte años, el borrachín tembloroso, el capullo tristón al que nadie quiere parecerse. Y no esperes nada mejor, te pueden mandar a hacer puñetas de todas formas, por cualquier chorrada"

La mirada de Gavin se hunde y se vidria y de repente capto lo humillante y profanador que debe sonarle mi perorata de beodo. Antes uno podía hablar así, hacer trizas a la gente por el trabajo, pero ahora todos se han puesto a la defensiva al respecto y como somos mayores parece que haya más en juego.

Mark Renton. Porno.

jueves, 4 de junio de 2009

Psicología sociable

En psicología existen tantan hipótesis estúpidas pensaba el otro día para mis adentros. Que si escribes así eres sumiso que si andas asá eres más bien extrovertido etc etc...

Que sí, que no te digo que puede ser acertado, en un porcentaje al menos, y que bueno al fin y al cabo buscamos explicaciones, nos gusten más o nos gusten menos. Sin embargo, no se ha de olvidar con quien trata la psicología: La psicología trata con personas.

Nada hay más complejo que las personas. Y más si se trata a la hora de explicar una conducta o una hora de pensar se ha de tener cuidado y precaución, pues en cosas tan concretas una persona puede ser un mundo y, aunque siempre exista una generalidad, también hay siempre un número de excepciones.

Estúpidos e ingenuos aquellos que crean que con el saber y la sabiduría de los libros o estudios basta para explicar toda conducta observable ya que para el trato con las personas hace falta más, hace falta una capacidad de empatía y una mente abierta al error de la ciencia que son esenciales para poder entender, y así explicar, la conducta de un sujeto.